- Una hora ganada al amanecer es un tesoro por la tarde.
- Templanza y trabajo son los dos mejores custodios de la virtud.
- No basta saber las cosas, es necesario practicarlas.
- Alegría, estudio y piedad: es el mejor programa para hacerte feliz y que más beneficiará tu alma.
- ¡Mi mayor satisfacción es verte alegre!
- Dios favorece al hombre alegre.
- El demonio no puede resistir a la gente alegre.
- Para ejercer una influencia benéfica entre los niños, es indispensable participar de sus alegrías.
- La dulzura en el hablar, en el obrar y en reprender, lo gana todo y a todos.
- ¡Cuántas almas se pueden atraer con el buen ejemplo!
- No basta amar a los niños, es preciso que ellos se den cuenta que son amados.
- A los niños se hace mucho bien tratándolos siempre con amabilidad. Hay que amarlos y estimarlos a todos por igual, aunque alguna que otra vez no lo merezcan.
- Por mucho que nos critiquen sigamos nuestro trabajo adoptando el siguiente sistema y precioso lema: obrar bien y dejar a la gente que hable.
- Para trabajar con éxito, téngase caridad en el corazón y paciencia en la ejecución.
- Donde reina la caridad, ahí está la felicidad.
- Humildad, caridad y modestia, no pueden estar separadas la una de la otra.
- Recordad que la educación depende de la formación del corazón.
- Quien tiene paz en su conciencia, lo tiene todo.
- Nos sirva de lección y de experiencia todo cuanto sucede.
- Respeto a todos, miedo a ninguno.
- No nos creamos necesarios.
- La base de toda educación es cuestión de corazón.
- De la sana educación de la juventud, depende la felicidad de las naciones.
FRASES
Suscribirse a:
Entradas (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario